miércoles, 16 de febrero de 2011

Boca de media noche





Solo tú, tú y tú, no existes más que tú, tus egoísmos, tus necesidades primero, tu vida, tus estudios, tu físico, tú y solo tú, y yo por si queda un espacio de tiempo. ¿Hasta donde vamos a ir parar?¿Y se supone que me tengo que callar cuando tu me lo ordenes? No soy absolutamente de nadie, ni tengo un papel adosado a la espalda que tenga tu firma. Y encima tú pretendes que yo baile a tu son, que yo pise las huellas que vas dejando y que me amolde a tu molde sin forma. Yo soy la que comparte tu vida contigo, y no la que vive por y para tu disposición que cuando quieres bien y cuando quieres no. No soy el entretenimiento en espacios de tiempo vacíos, ni una norma que cumplir en ciertos días del mes. Si me leyeses cada vez que escribo ya me hubieras dicho algo respecto a esto, y ahora te demuestro que no me lees, que ni tan siquiera lo intentas y que el aprecio que me tienes está en decadencia. Créeme, ya no eres el que eras, un día me enamoras y otro día sacas lo peor de mi, estoy harta de tus medias tintas y de tus medias enteras, tenme siempre, no a ratos, yo no soy tu beso de buenos días, ni tu boca de media noche, yo soy tu día a día.



No hay comentarios: